Por qué debo llevar a mi niño a consulta si está sano?

 Las consultas de seguimiento al niño sano.

Bebé siendo auscultado.

 

Este tipo de consultas se basan en la medicina preventiva. Su objetivo es hacer un seguimiento al crecimiento y desarrollo de los niños y adolescentes. Además es el espacio en el que el pediatra brinda informaciones a los padres sobre educación para la salud de sus hijos.

• Crecimiento: son los cambios físicos que ocurren en el niño/a como el aumento de peso y de la talla.
• Desarrollo: son las habilidades que adquieren los niños/as de acuerdo a su edad: gatear, sentarse solo, caminar, correr, etc.

Es importante que los padres reconozcan la importancia de estos controles de salud. No es necesario que el niño o niña esté enfermo para llevarlo al pediatra. Las consultas de seguimiento son programadas en momentos  claves del desarrollo psicomotor del niño. El objetivo principal es detectar alguna alteración o situación de riesgo en el niño y tomar la conducta apropiada. Un momento clave de las consultas de seguimiento es la Educación para la Salud pues es donde les brindamos toda la información  y orientaciones necesarias a los padres y aclaramos sus dudas en cuanto a:

1. -         Cómo debe ser el desarrollo normal de un niño de acuerdo a su edad.
2. -         Cómo apoyarlo para lograr las destrezas propias de la edad.
3. -         Asesoramiento para lograr una alimentación adecuada en cada etapa.
4. -         Cómo prevenir accidentes.
5. -         Actualización del esquema de vacunación.
6. -         Una adecuada salud buco-dental.
7. -         Ofrecer pautas de crianzas.

¿Con qué frecuencia se realizan las consultas de seguimiento?

Desde las consultas que se hacen a la embarazada (consultas prenatales) se ofrecen una serie de orientaciones entorno al nacimiento, los cuidados al recién nacido, la lactancia materna, el  colecho y otras dudas relacionadas  con la salud y el bienestar del bebé que los padres tengan.

Luego del nacimiento las consultas de seguimiento tienen una programación que varía en algunos países y se puede ajustar en cada caso en particular. En la primera consulta, de los 5-7 días, se ofrece nuevamente asesoramiento sobre lactancia materna, cuidados y hábitos  higiénicos del recién nacido, colecho,  etc.

Si no hay ninguna dificultad el seguimiento se recomienda hacer semanal el primer mes, luego siguiendo el siguiente esquema en los primeros dos años: al 1 mes, 2, 4, 6, 9, 12. Después del año las consultas se realizan cada 3 meses (15, 18 y 24 meses). Del 2do al 5to año se sugiere visitar al pediatra cada 6 meses. Luego de los 5 años una consulta anual será suficiente.

Cada consulta debe incluir la evaluación del crecimiento y desarrollo con toma de peso, talla, perímetro cefálico, detección de trastornos de los parámetros pondo-estaturales (talla y peso) y del desarrollo psicomotor.  Se realizarán interconsultas con algunas especialidades médicas con el objetivo de detectar trastornos auditivos y/o visuales, criptorquidia, hipotiroidismo, anemia, displasias de cadera, malformaciones genitales, detección de maltrato infantil, entre otros.

En los niños entre los 3 y 10 años además de los aspectos anteriores se ofrecerán consejos sobre cómo ayudar a los niños a adquirir las habilidades motoras y del lenguaje según su edad. Además sobre adaptabilidad escolar y social, actividad física y ejercicios, detección de la obesidad, prevención de accidentes del hogar e ingestión accidental de sustancias tóxicas, etc.

 En los adolescentes se abordará sobre sexualidad, ETS y embarazo, consumo de alcohol, drogas, tabacos, protección solar, hipertensión, entre otros temas de salud.

Recuerden que  no es necesario que su hijo(a) esté enfermo para llevarlo a consulta con el pediatra. La detección temprana de alteraciones permite la intervención oportuna para lograr que nuestros hijos estén saludables.

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